Anlan
Mis aparatos faciales I: el cepillo limpiador Anlan mutifunción

Hoy comienzo una serie con mis aparatos faciales, para presentaros cada uno de ellos, y este primer capítulo le ha tocado al aparato facial limpiador Anlan, no por ser el primero en llegar si no por ser el último y haberse convertido en todo un favorito. Aunque es difícil llamarlo solo limpiador pues viene provisto de una serie de funciones que os detallo a continuación.
Presentación
El Anlan te viene muy bien protegido en la típica cajita de cartón que puedes reutilizar para guardar tus utensilios varios de belleza, y además trae consigo una bolsita verde aterciopelada en la que poder guardarlo cuando no necesites usarlo.
Descripción
El aparato «facial» Anlan presenta una forma redondeada de dos caras: una cara a imitación del Foreo Luna, muy eficaz limpiando, muy higiénico, repleto de unas cerdas de silicona; la otra cara, metálica, y con la impresión de un círculo en su interior, nos deja algo más intrigados. Además contiene otro aro metálico, todo una monada. A los lados posee unos botones de + y -.
Funciones
Primera función: la que la propia máquina describe como «exportación». Según las instrucciones del propio aparatito, tienes que incrustar un algodón en la parte metálica ayudándote con el aro metálico a sujetarlo, te aplicas una loción, algún tónico o agua micelar y le das a encender una sola vez seguida al botón, en el que conectarás esta primera función con su luz azul. Por lo visto, puedes conseguir una pequeña limpieza de poros y de células muertas, gracias a la luz led azul y a la microcorriente EMS.
Segunda función: «limpieza profunda». Con esta segunda función, pulsamos una segunda vez el aparato de encendido/apagado y conseguimos una luz verde y una alta vibración modulable. Tan solo tenemos que poner unas gotitas de gel limpiador o espuma en la parte de silicona e ir limpiando nuestro rostro delicadamente.
Tercera función: «Terapia EMS». Ahora que tenemos nuestra piel realmente limpia es el momento de hidratarla con nuestro hidratante habitual o nuestro sérum. Apretando una tercera vez en el botón de encendido apagado la luz se volverá roja, para los más entendidos ya sabéis que esta luz ayuda a combatir las arrugas y el envejecimiento, y la microcorriente también se activará, ¡Que se preparen tus signos de expresión!
Cuarta función: Luz violeta. Activando por cuarta vez el botón de encendido/apagado, nuestro Anlan se vuelve silencioso parar devolvernos simplemente una luz lila que ayuda a la absorción de nuestros productos y ayuda a la cicatrización, perfecta para concluir toda una sesión de belleza.
Mis tips:
– Usa la función exportación con agua micelar para lograr una limpieza más profunda
-Dale la vuelta cuando estés realizando la limpieza profunda y cierra tus poros con la luz verde
-Utiliza tu potente antiarrugas cuando estés utilizando la luz roja
-No te impacientes y relájate, al utilizar el Anlan en cada función por cuatro minutos, termina apagándose.
Puedes encontrarlo en Amazon por 29,90. ¿Lo has usado ya? Coméntame si te gustan este tipo de aparatos faciales y que resultado has obtenido.